Hogar sin toxicos | Nuestra casa está llena de sustancias que causan enfermedades. Infórmate y actúa para lograr un hogar más sano.

Nuestra casa está llena de sustancias que causan enfermedades. Infórmate y actúa para lograr un hogar más sano.

fondo-nubes-grises

Hidrocarburos aromáticos policíclicos

Es un muy vasto grupo de sustancias entre las que se incluyen naftaleno, acenafteno, antraceno, trifenileno, fenantreno, benzo(a)pireno, benzofurano, fluoranteno, etc.

Son originados por la combustión de petróleo, gasolina, carbón, basuras, tabaco, quema de ciertos inciensos, incluso carne a la parrilla.

También algunos son empleados en la industria para producir cosas tales 

En el hogar estos contaminantes pueden proceder (aparte de los que entren desde el exterior) estufas, chimeneas, velas, incienso, tabaco…como plásticos, conservantes de la madera, resinas, colorantes, revestimiento de tuberías, medicamentos, etc.

Uno de los productos más usados que contiene decenas de estos compuestos es la creosota, que ha sido ampliamente usada, por ejemplo, como conservante de la madera. La UE adoptó algunas medidas para limitar o eliminar algunos usos (como en espacios cerrados). Entre sus usos se ha contado también su empleo en productos para tratar enfermedades como la psoriasis.

Uno de los hidrocarburos aromáticos con más presencia en la creosota, es el naftaleno.

El naftaleno es , entre otras cosas, materia prima en la síntesis de ftalatos y resinas sintéticas, plastificantes del hormigón, y se emplea en la producción de placas de yeso, cauchos sintéticos, pinturas, el insecticida carbaril, etc.

Según la OMS dentro de los edificios puede concentrarse naftaleno por el uso de determinados productos de consumo tales como disolventes de usos múltiples, lubricantes, encendedores de carbón y lacas para el cabello, calentadores de queroseno (especialmente con mala ventilación), materiales de goma y especialmente por la naftalina , usada como antipolillas y como desinfectante en inodoros (aunque este uso ha disminuido, principalmente en el oeste de Europa).

Diversos HAPs son conocidos cancerígenos, mutagénicos y teratogénicos, además de haber sido asociada la exposición prenatal a parto prematuro, bajo peso al nacer, malformaciones congénitas cardiacas, menor coeficiente intelectual, retraso en el  desarrollo, alteraciones de conducta, ansiedad/depresión o asma infantil. La base de datos de The Collaborative on Health and The Environment los asocia, con mayor carga de evidencia, a cáncer (vejiga, laringe, pulmón, mama, esófago, nasofaríngeo, páncreas, próstata, riñón, escroto…), porfiria, inmunosupresión, fotosensibilidad, leucemia de adulto, cáncer de huesos, cáncer colorrectal, enfermedades coronarias,  menopausia temprana, melanoma,  cáncer oral, reducción de la fertilidad  masculina, cáncer de estómago…

Productos relacionados